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Basílica Di San Pietro In Vincoli Roma

La Basílica de San Pietro in Vincoli Roma es uno de los ejemplos más antiguos de una iglesia cristiana primitiva en el mundo. Algunos la recuerdan también con el nombre de "Basílica Eudossiana", porque fue encargada por la emperatriz del mismo nombre, esposa de Valentiniano III.

La ubicación es de fácil acceso desde la zona del Foro Romano: mientras paseas tranquilamente por la calle, admirando los símbolos del poder imperial, puedes ver una estrecha escalera a la derecha, dedicada a San Francisco de Paula, y desde aquí hacer un pequeño desvío en tu itinerario para visitar este llamativo monumento de arquitectura sagrada.

Aunque la iglesia fue fundada en el siglo V d.C., ha sufrido numerosas intervenciones a lo largo de los siglos que han alterado su aspecto original. En el siglo VIII fue reconstruida casi en su totalidad, mientras que en el siglo XVI se reconstruyeron la fachada y el pórtico y, finalmente, el interior fue renovado en el siglo XVIII.

El altar mayor conserva desde hace más de 1.500 años una reliquia legendaria: las dos cadenas utilizadas para encarcelar a San Pedro en Jerusalén. Se dice que el nombre de la Basílica de San Pietro in Vincoli Roma deriva de estos dos objetos que "atan" al santo. Cada año, miles de fieles acuden a venerar las reliquias y el 1 de agosto se celebran fiestas especiales.

La obra más sensacional del complejo es el Moisés de Miguel Ángel. La estatua, colocada en el crucero derecho en 1545, fue esculpida en 1513 como decoración del monumento funerario del Papa Julio II, encargado al maestro Buonarroti.

El gran complejo arquitectónicoque iba a constituir un mausoleo, se dejó de lado en lugar de canalizar los recursos hacia el reconstrucción de la Basílica de San Pedro. Sin duda, le asombrará la majestuosidad y la belleza de las figuras esculpidas por Miguel Ángel: las venas evidentes y los músculos tensos dan un aspecto real y dinámico a la escena.

Menos conocidos, pero igualmente dignos, son el mosaico bizantino del siglo VII que representa a San Sebastián y la hermosa cripta, situada bajo el altar mayor.

Un consejoNo se detenga en las apariencias y explore el complejo con detenimiento; desde la fachada puede parecer cualquier otra iglesia moderna, pero el interior le sorprenderá.


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